NO ES LO MISMO, HACER LA TAREA, QUE LOGRAR EL OBJETIVO.
El Trabajo en granjas. Normalmente está centrado en las tareas, lo que significa que el personal no sabe cuáles son sus metas, por ende, no sabe si las alcanza o no y menos si hay una estrategia para hacerlo.
En granjas centradas en la tarea, el personal se vuelve más insensible, no le importan los resultados, ni la calidad, solo las horas trabajadas y la cantidad de trabajo. Existen más quejas, más ausentismo y la rotación es muy elevada.
Se vuelven tareas rutinarias individualizadas, no se llevan bien con el trabajo de equipo y destruyen la autoestima del personal. Ejemplos claros son lavar, procesar lechones, vacunar, tratar, mover animales, etc.…
La gran diferencia de trabajar por objetivos es que todo el personal de la granja, se entera de los objetivos, la estrategia para alcanzarlos y el límite de tiempo para conseguirlo, se genera un mejor ambiente de trabajo, la gente se siente más involucrada con la empresa, puesto que el objetivo común, les da sentido de pertenencia y finalmente es un gran motivador, ya que si se logran los objetivos, la autoestima crece en general y si no se logran los objetivos, el reto para hacerlo es otro gran impulso y la satisfacción laboral se vuelve un factor importante que ayuda incluso a la reducción de la rotación de personal.
Recomendación: Por las mañanas, asegúrese de comunicar los objetivos a su equipo de trabajo, no solo las tareas.
Los objetivos deben ser, SMART, simples, o claros, detallados concisos, medibles, en porcentaje, numero, unidades, kilos etc.…
Alcanzables, no fáciles, pero tampoco imposibles, para evitar frustraciones
retadores, deben implicar esfuerzo, y consistencia.
Tiempo, deben tener una fecha de caducidad, semana, mes año.
Evalúe semanalmente los objetivos con su equipo.